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Volvemos a estar mirando al TTIP y las razones de desconfianza en las personas y hacia lo que se cuece en su negociación, y a dónde nos lleva el que se haga entre bambalinas y con negociadores técnicos, a las cuales salen avalando políticos adictos al sistema capitalista, este que está llevando al deterioro a toda la clase media y a la falta de oportunidades a la juventud, todo esto no ayuda a traer paz.

Dicen que ya no tiene vuelta de hoja, que la mundialización de las finanzas ha venido para quedarse, y que sus opositores son populismo de derechas, o nuevos partidos de izquierda que no son más que accidentes desfasados nacidos fuera de época, los cuales no aportan soluciones sino estancamiento en lo que ya no existe, o soluciones locales o nacionales ya inservibles. Puede que todo esto esté siendo así, pero el crecimiento continuo para la acumulación infinita de capital de una ínfima parte de la población no es más que una estafa tan imposible de sujetar como una estafa piramidal a la larga. El problema está en saber sobre este tinglado llamado “sistema capitalista” cuánto daño y sufrimiento va a causar en todas las personas al caer, y cómo va a ser su derrumbe sin controlador y explosivo sobre toda la humanidad. De momento avanza impasible por todo el orbe arrasando a todo lo que se le pone por delante, dejando un paisaje desolador, ahora ya también en las naciones del mundo considerado rico en el que se convive con tasas de paro del 20 %, y diciendo que son la única solución con futuro, y de eso y sobre eso se trata en el TTIP, en el cual nos venden una ilusión y nos retratan una realidad que esconde nuevas mermas de todos los derechos sociales llamándolos recortes.

Y es estas estamos, cuando hay unas elecciones en esta España nuestra, donde el gobierno en funciones le firma por adelantado a Europa una merma de derechos, en aras de atajar un déficit sin el cual hubiera sido todo ya imposible y hubiera traído una más que posible explosión social.

¿Desde dónde, por y para qué, cómo, cuándo y quién tiene ganas con este panorama de predicar y contar la verdad, y por qué y a quién va a salir defendiendo a los ciudadanos o al capital, y contando la verdad?