
Venir a morir a, Ciudad Rodrigo y más concretamente a sus Alamedas es relativamente fácil, si eres un árbol.
Solo te tienes que topar, con la suerte (desgracia diría yo) de encontrarte en el vivero donde te han visto crecer, con un jardinero de este Ayuntamiento, que te seleccione, te meta en su furgoneta y te lleve, directo al matadero, en el que se ha convertido Ciudad Rodrigo.
Una vez plantado en el lugar donde otros compañeros y compañeras, antes que tú, han perdido la vida, a manos de motosierras asesinas, sin piedad, los llamados jardineros, que yo diría más bien, ejecutores,con la herramienta entre sus manos, no limpias de verde savia, ejecutan la macabra poda.
Y vamos viendo nuestras fuertes ramas, caer, con terrible dolor, guías que nos sirven para crecer, que transportan nuestros nutrientes, nuestra sangre, caen al suelo del cementerio en el que se ha convertido, lo que antes era un lugar para el recreo y el goce de la raza humana..
¡¡¡Ay la raza humana, que destruye, inconscientemente su medio, su futuro..!!!
¡¡¡¡Estamos aquí!!! , , pero las malditas motisierras ahogan nuestro desesperado grito.
5 Comentarios
¡Vaya orgía de signos de puntuación! ¡Maita mía! ¡Se te ha debido caer el bote de las comas encima del texto!
…Y en verano te alcanzará la desdicha… ¡Ay sulfuro que confunde a la desidia!
Seguir preocupados por los árboles, y no por lo que se nos viene encima a los humanos
Vaya idiotez, todo se tiene que regenerar, árboles incluidos, o los que han cortado no los plantó nadie, y en monte salvaje no se secan, caen y crecen otros, si estaban que daba pena y con peligro de caerse, día de aire, el caso es quejarse, pues no hay árboles en todo Ciudad Rodrigo, tenemos una zona de Picón que es de lo mejor de la provincia, pero claro, si gobernará la izquierda….
Tiene Usted razón. Han convertido las alamedas en un pseudo parque de mierda que nos es parque ni ná.