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Esta mañana se ha celebrado la misa en honor de San Blas, obispo, que como cada 3 de febrero se viene celebrando.

Este año el obispo administrador apostólico Jesús García Burillo, acompañado por el sacerdote Jesús Gutiérrez, ha celebrado la eucaristía en la iglesia parroquial San Juan Bautista de Sanjuanejo, con la asistencia de 11 fieles, entre ellos algunos cofrades de la Cofradía de San Blas.
La limitación de aforo publicado por la Junta de Castilla y León, a 25 personas, a disuadido a fieles a acercarse a la iglesia. Nunca en la historia de la celebración de este santo se había visto tan poca asistencia.

García Burillo ha recordado a San Blas en la homilía y sus capacidades de curación en los problemas de la garganta y del coronavirus.

Finalizada la misa José Antonio Paniagua, miembro de la Junta Directiva de la Cofradía, pidió al obispo rezar el Padre Nuestro, por el sacerdote Bernardino San Nicasio, todos los cofrades y en especial de los enfermos. El obispo pidió que fuera él mismo en que hiciera la prédica.

Antes de comenzar la misa ha bendecido “gargantillas” y a los presentes. Este año la venta de las gargantillas sólo se hará por internet.

Este año todos los demás actos de San Blas han sido suspendidos por la Cofradía, como la venta in situ de las gargantillas, el convite. La romería este año no se celebrará, que para ello el tiempo está ofreciendo una jornada desapacible.